Le Violon d´Ingres


Esta expresión, actualmente en desuso, se utilizaba para hablar de personas que, siendo conocidas por alguna faceta profesional, social o laboral, solían ejercer otra en apariencia muy alejada de la primera.
Jean Auguste Dominique Ingres fue un pintor francés representante del estilo neoclásico, que vivió entre los siglos XVIII y XIX, y que fue extraordinariamente conocido tanto en Francia como en Europa. Algunos de sus cuadros, "Napoleón entronizado, La gran Bacanal, La odalisca, La fuente..." nos son hoy aún muy conocidos a través de catálogos y monografías.
Ingres fue asimismo un virtuoso violinista que deleitaba a la alta sociedad contemporánea que compraba sus lienzos con conciertos de exquisita música camerística. Su afición fue muy celebrada y, "El Violín de Ingres" pasó a formar parte del lenguaje como sinónimo de segunda ocupación ejercida con esmero pero sin dedicación de profesionalidad.

Jean-Auguste Dominique Ingres

A la lista podríamos añadir muchos nombres conocidos: Churchill optó por la pintura, Einstein por el violín, Unamuno por la papiroflexia como esencia de la geometría, Woody Allen por el clarinete, Cajal por la fotografía... 
Pero si hablo de fotografía... clara y conscientemente, siempre acabo mencionando a Man Ray y su evocador "Violín de Ingres". Emmanuel Radnitzky (Man Ray) fue un fotógrafo dadaísta y surrealista estadounidense. El surrealismo y la fotografía cuando se combinan... son irresistibles y maravillosos. La pintura, el cine, la escultura y la escritura también fueron otras de sus pasiones. Era un maestro de todos los oficios y destacó en todos y cada uno de los medios artísticos nombrados.
"Fotografío las cosas que no quiero pintar, cosas que de por sí existen"
Man Ray fue uno de los pioneros del estilo de vanguardia y la ilustre fotografía en sepia de la señora Kiki de Montparnasse (Alice Prin) portando tan sólo un turbante estuvo muy influenciada por los desnudos de ensueño del otro Ingres (Dominique).
Ray pintó manualmente las notas en forma de " f " sobre la impresión fotográfica. Transformó mágicamente el voluptuoso cuerpo de la mujer en un instrumento musical de cuerda. La falta de brazos, aunque de alguna manera es inquietante, se suma a la apreciación y a la codificación de la figura femenina. El estilo puede ser semejante a una versión clásica de la reciente ilustración. Manipuló fotografías a placer y los resultados fueron sensacionales e intemporales.

El violín de Ingres. 1924
                                                          
Se han hecho cientos de versiones posteriores de esta fotografía tan famosa de Man Ray. Sigue siendo uno de los fotógrafos más originales de la historia y sus obras concibieron la revolución digital de hoy en día.   


         











Poseer un Violín de Ingres vale por ser capaz de diversificar el interés del
individuo por el universo intelectual que le rodea. 
Tener avidez por ser, imaginar, crear, observar, sentir, recorrer.
Nada es nuestro excepto lo más esencial: el aire, las horas de descanso, el mar, el cielo, los sueños;  todas aquellas cosas que tienden hacia lo eterno o hacia lo que imaginamos como tal, y que posteriormente forman parte de nosotros.




Con deferencia, decido este espacio a todos los que me han acompañado en cada una de mis ocasiones.